Los árabes introdujeron en España las espinacas en el siglo XI y la consideraban la mejor de las hortalizas. En el siglo XV se extendió su cultivo por toda Europa. La espinaca en una planta de la familia de las amarantáceas y se cultiva como verdura porque sus hojas son grandes y tienen un color verde oscuro.

Se puede consumir fresca, cocida o frita y duirante todo el año porque su cultivo es durante todo el año. Actualmente es la verdura que se encuentra en todos los supermercados congelada. Es rica en vitaminas A, E y K y también rica en yodo.

Ingredientes:

500 gramos de espinacas
Mantequilla y aceite de oliva
3 cebolletas frescas cortadas en finas rodajas
125 gramos de nata fresca
Nuez moscada rallada
Sal y pimienta
Pechuga de pollo
Huevos

Elaboración:

Colocar las espinacas en un bol y cubrir con agua hirviendo. Escaldarlas durante medio minuto y refrescar en agua con hielos para fijar el color. Escurrir y cortar finamente.

Calentar el aceite en un sartén y dejar cocer la cebolleta fresca empapada en aceite durante 3 minutos hasta que quede pochada. Agregar las espinacas, la nata fresca y la nuez moscada. Sazonar. Llevar a ebullición y después dejar 3 minutos a fuego suave antes de servir.

Si se quiere, en el último momento, escalfar unos huevos encima y dejar que se hagan con la tapa puesta. A la hora de servir, volver a rallar un poco de nuez moscada y pimienta por encima. Saltear la pechuga salpimentada por los dos lados, cortar en tiras y servir sobre las espinacas.