El co propietario de El Bulli Juli Soler se ha convertido en el mejor director de sala del mundo tras haber recibido el Grand Prix d’Art de
El co propietario de El Bulli Juli Soler se ha convertido en el mejor director de sala del mundo tras haber recibido el Grand Prix d’Art de
El catalán recibió este prestigioso galardón de manos de D. Georges Husni, Presidente de
Este premio, concedido por
Algunos de los que ostentan este título anual son Juan Mari Arzak (1992), Ferran Adrià (1994), Pierre Gagnaire (1995), Michel Bras (2002), Heston Blumenthal (2006) y Alain Ducasse (2007).
Nacido el 31 de mayo de 1949 en Terrassa (Barcelona), Juli Soler es un confeso apasionado del buen servicio, la atención a los comensales y la importancia de la relación con ellos en la mesa y además, de la música anglosajona.
Antes de convertirse en director de El Bulli en 1981, dedicó varios mesas a visitar todos los grandes de la restauración y la
Además, Soler se lanzó también al mundo de los vinos con pasión, no como snobismo, sino con meticulosidad, de forma sofisticada, y con una sola finalidad: hacer feliz al comensal.
En marzo de 1981 abre la primera temporada en El Bulli como director. En 1990 crea sociedad SC con Ferran Adrià, que en 1994 convierte en SL, compran el Restaurante y sin parar de innovar hasta hoy.
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