Se acerca la Semana Santa, momento que muchos aprovecharán para descansar y relajarse, y… ¿Dónde mejor que en Isla Mauricio? Aquí os proponemos un itinerario para poder disfrutar todo lo que Isla Mauricio tiene que ofrecernos. Nada más llegar a este paraíso, podemos dirigirnos a cualquiera de sus lujosos hoteles, eso sí, una vez estemos en el hotel, no podemos olvidarnos de recorrerlo para no perdernos ninguno de los servicios que ofrezca. Después de un largo viaje, puede apetecernos un baño de sol en las maravillosas playas de cristalinas aguas de Mauricio.

SEMANA SANTA EN ISLA MAURICIO

Se acerca la Semana Santa, momento que muchos aprovecharán para descansar y relajarse, y… ¿Dónde mejor que en Isla Mauricio? Aquí os proponemos un itinerario para poder disfrutar todo lo que Isla Mauricio tiene que ofrecernos. Nada más llegar a este paraíso, podemos dirigirnos a cualquiera de sus lujosos hoteles, eso sí, una vez estemos en el hotel, no podemos olvidarnos de recorrerlo para no perdernos ninguno de los servicios que ofrezca. Después de un largo viaje, puede apetecernos un baño de sol en las maravillosas playas de cristalinas aguas de Mauricio.

Para cenar podremos elegir entre los numerosos restaurantes de exquisita cocina disponibles en el hotel. Nuestro segundo día en la isla, podemos aprovecharlo para visitar la zona norte de la misma, incluyendo en esta visita el famoso Jardín Botánico de Pamplemousse, La Citadelle, y por supuesto, las zonas comerciales de “The Caudan Waterfront” y el mercado local del Port Louis, donde descubriremos todo un mundo de colores y aromas a especias.
Después de un delicioso almuerzo en la típica casa colonial de Eureka, en la región de Moka y disfrutar de un agradable paseo por sus fabulosos jardines, tal vez nos apetezca volver al hotel para seguir mimándonos con sus lujos y comodidades.

Durante nuestro tercer día de estancia en Mauricio, os proponemos alguna actividad para que podáis disfrutar del mar, como un apacible crucero acompañado de canapés y champán, que nos llevará a algunas de las más increíbles aguas para la práctica del snorkelling que hará que nos maravillemos con las especies marinas que pueblan las aguas de la isla. Por la tarde, después del ejercicio, podremos disfrutar de un relajante masaje en el spa de nuestro hotel.
Para el cuarto día, recomendamos seguir conociendo Isla Mauricio ya que esconde auténticas joyas que no podemos perdernos. Para ello, nos dirigiremos al Sur para visitar Chamarel, la tierra de los siete colores, la destilería de ron la Rhumerie de Chamarell, el Parque Nacional de Black River Gorges y la costa sudoeste de la isla. Ha sido un largo día lleno de emociones, así pues, se impone regresar al hotel para disfrutar de una agradable velada en el mismo.
El Quinto día, podemos aprovechar para disfrutar de las instalaciones del hotel y de la playa; o bien, podemos jugar al golf en alguno de los magníficos campos de golf repartidos por toda la isla. Los más aventureros pueden preferir ir a practicar submarinismo, dar un paseo a caballo o en quad o, ¿Por qué no?, en bicicleta.

Y llegamos al sexto día en el paraíso, durante el cual os recomendamos visitar Grand Baie para dejaros cautivar por las magníficas vistas del mar que desde allí obtendremos.
Nuestras vacaciones, están casi llegando a su fin, así pues, recomendamos pasar la tarde descansando y relajándonos en nuestro hotel o en cualquiera de las playas de la isla.
Hemos querido daros ideas para que podáis disfrutar de Mauricio, sin embargo, la gama de posibilidades no se agota aquí, hay muchas más opciones para todos los gustos. Solo tenéis que ir a Isla Mauricio y descubrirlas por vosotros mismos.